miércoles, 20 de marzo de 2013

LA MUERTE DE UN GENOCIDA


Murió José A. Martínez de Hoz, el mayor representante civil del golpe de 1976.

Aquel que ideó y llevó adelante el plan sistemático de destrucción del aparato productivo, de la pequeña y mediana empresa, el que transformó la matriz económica productiva en otra de especulación y servicios y que necesitó del terrorismo de Estado para consolidar la apropiación de la riqueza en favor de la concentración económica.

No fue cómplice, fue ejecutor del Genocidio, porque Videla, Massera y él formaban parte del mismo esquema de terror y rapiña.

Debió haber muerto en la cárcel, como merecía, pero también usó su poder para evitar la justicia.

A pocos días de cumplirse 37 años del golpe cívico-militar, no olvidamos, no perdonamos, seguimos exigiendo justicia.