Cuando apenas pasaron pocas horas de las exequias oficiales y aún continúa la peregrinación popular para despedir a su líder, es imprescindible volver sobre el legado de Hugo Chávez. Podría definirlo con una frase pronunciada frente a las cámaras de Telesur por un joven de 27 años: “Bolívar liberó la Patria, Chávez liberó al Pueblo”. Ese joven que tenía apenas 13 años cuando el Comandante asumió la Presidencia, agregó de manera terminante: “antes me discriminaban por afrodecendiente, ahora somos todos iguales y voy a la universidad”.Hugo Chávez marcó una época, tanto en Venezuela como en el resto de América Latina. El neoliberalismo, que había convertido a esta parte del mundo en la zona más desigual del planeta, fue implosionando más temprano que tarde en cada uno de los países de la región y el primero fue Venezuela con el Caracazo de 1989. Diez años después, el pueblo consagró su primer mandato, y Chávez desafió a los centros hegemónicos del poder demostrando que se podía y se debía cambiar, que las democracias podían recuperar su capacidad de transformar la realidad en beneficio de las grandes mayorías
Y después fue Lula y después fue Kirchner. Estos tres presidentes se convirtieron en el eje de un cambio de paradigma que rompió con el Consenso de Washington para desarrollar democracias populares y latinoamericanistas en las que el trabajo, la salud, la educación, el desarrollo científico, la expansión de la economía y la generación de empleo fueron pilares de un nuevo tiempo.
Esta trilogía presidencial que luego se extendió a Bolivia con Evo Morales, a Uruguay con Pepe Mujica y a Ecuador con Correa y que incorporó en los mismos sueños a los países del Caribe, le dijo no al Alca en el 2005, evitando la destrucción de las economías locales en beneficio de los países centrales y a partir de allí generaron instrumentos de política internacional como la Unasur, que impidieron por primera vez en 100 años evitar el magnicidio contra Evo morales y el golpe de Estado contra Correa.
El Alba, la Celac, el Mercosur ampliado, el Banco del Sur, la Unasur vinieron a reemplazar instituciones continentales perimidas y le dieron una dinámica a la región que es observada atentamente por los pueblos emergentes.
Podría haber sucedido todo esto sin Chávez? Qué rol hay que asignarle a él y al resto de los presidentes latinoamericanos?
Si bien todos ellos son emergentes de la crisis del sistema, cada uno podría haber tenido una salida conservadora y dejar que continúen gobernando las grandes corporaciones. Por eso, el papel de estos presidentes fue fundamental para liderar el proceso de cambio y conducirlo en los momentos más aciagos. Haber visto a todos los líderes latinoamericanos arribar a Buenos Aires para sostener la democracia ecuatoriana y rechazar el golpe de Estado, no sólo fue una caricia para el alma, sino que significó un antes y un después en la política de la región en casi 200 años.
Latinoamérica está viviendo un proceso único, sólo comparable a la gesta emancipadora del siglo XIX. Democracias plenas con participación popular, respeto irrestricto a los derechos civiles tradicionales y a los derechos humanos, desarrollo económico con inclusión social, soberanía política de los Estados con acuerdos de integración y justicia social.
Chávez fue fundamental, claro también lo fueron Kirchner y Lula y hoy lo son Dilma Rousseff y Cristina Fernández de Kirchner .Pero hoy hablamos de Chávez, de su legado y del pueblo. Los pueblos otorgaron los liderazgos y ellos depositarán la antorcha libertadora en nuevas manos, para que la Revolución Bolivariana y la Revolución Latinoamericana continúen generando más justicia, desarrollo e igualdad.
Gracias y hasta siempre!